Quizás eres de esas personas que piensan que los faros del auto siempre se encuentran en buen estado o que se encenderán cada vez que los necesites. Pero, ¿alguna vez te has preguntado si requieren mantenimiento? En este post te contaremos todo lo que necesitas saber.
Las lentes, que serían la cubierta de plástico de los faros, deben estar siempre transparentes. Si por alguna razón las ves un poco amarillentas, quiere decir que necesitan una limpieza.
Estas lentes están expuestas a los rayos ultravioleta y con el tiempo pueden hacer que se vuelvan opacas o amarillentas, contribuyendo a que pierdas visibilidad cuando conduces.
Para limpiarlos solo tienes que adquirir un kit de restauración de lentes, que se consiguen en cualquier casa de accesorios para autos. Estos vienen con un líquido y cera especial, junto con paños para que puedas restaurar el color inicial. Es muy sencillo hacerlo. Asegurate de pasar muy suavemente el líquido y el paño en la lente para quitar imperfecciones y luego pon la cera para darle el toque final.
Verás que con un buen pulido y lustrado quedarán como nuevas.
Otro elemento a tener en cuenta son las bombillas de los faros. Estas también tienden a atenuarse con el tiempo y deben ser reemplazadas dependiendo de la frecuencia de su uso.
Si vas a cambiarla, recuerda tener a mano el manual de tu vehículo para saber exactamente cuál es la que lleva tu modelo. Con esa información, ve y compra la indicada.
Si eres de esas personas que conducen mucho por la noche, puedes optar por comprar una bombilla de larga duración. Estas son un poco más caras que las estándares pero duran tres veces más.
Una vez que hayas cambiado las bombillas, el siguiente paso es revisar que estén centradas y mirando hacia la carretera de forma correcta.
Incluso si no las has cambiado, las bombillas con el tiempo pueden desalinearse, apuntar hacia arriba, abajo o hacia un lado. Una forma de alinearlas es:
-Asegurarse de que tu auto esté nivelado. Quita todo lo que pueda alterar el balance, como por ejemplo algo que tengas en el baúl.
-Acercar el carro a una pared lisa. Lo más cerca posible. Luego, encender los faros.
-Utiliza cinta adhesiva para marcar el centro de donde cada rayo de luz se marca en la pared. Pon un trozo de cinta verticalmente y horizontalmente. El trozo vertical debe tener un metro de altura aproximadamente.
-Retrocede tu vehículo unos 7 metros, manteniendo las luces encendidas. Si las bombillas se encuentran alineadas, la porción más intensa del rayo de luz debe estar justo debajo o en el centro del trozo de cinta horizontal y a la derecha del vertical.
Si requieres ajustar los faros, normalmente consisten en un perno o tornillo en los lados o en la parte trasera. Ajústalos o muévelos según sea necesario.
Si encuentras algún problema al limpiar o inspeccionar tus faros, recuerda que contamos con expertos que pueden ayudarte. A través de nuestro servicio, Maresa Service, podrás dirigirte a cualquiera de nuestros talleres autorizados con personal especializado en diferentes marcas. Y también podrás encontrar repuestos originales en todo momento.
Recuerda que el mantenimiento de los faros de tu vehículo son para tu propia seguridad y la de otras personas.
