Ventajas de uso de repelente en vidrios y parabrisas

Aplicar repelente de agua en el parabrisas permite sellar la superficie, evitando que se acumule agua que impida la correcta visibilidad, reduciendo los riesgos de percances en la vía, en caso de se presenten climas adversos durante la movilización.

Su aplicación es sumamente sencilla, y la duración del efecto, dependiendo del producto, oscila en los 6 meses.

Los productos repelentes se deben aplicar principalmente en el parabrisas delantero, aunque también puede ser conveniente hacerlo en la parte trasera; Lo más importante es limpiar muy bien la superficie a impermeabilizar y dejarla secar antes de usar el repelente, para hacerlo puedes usar agua, jabón o cristales limpiadores. Una vez limpio, rociarás el repelente en un trapo y lo frotarás en círculos sobre la luna escogida. A continuación, deja secar el producto y retira los excedentes con un paño limpio y ¡Listo! El parabrisas está preparado para repeler el agua y tú disfrutarás de una conducción mucho más segura.

Algunas ventajas de su uso son:

• Los productos repelentes de lluvia contienen, entre otras sustancias, ciertas resinas acrílicas o polímeros transparentes que se adhieren a la superficie del cristal, rellenando los poros, y formando una fina película que resiste a las condiciones ambientales, mientras dura el efecto del producto.
  
• El repelente mejorará tu visibilidad y te permitirá conducir sin usar los limpiaparabrisas. El agua resbalará mejor sobre este y el propio aire de la marcha irá desechando las gotas de lluvia que dificultan la conducción.
  
• Funcionan como repelente de hielo. Este tipo de productos son antiadherentes, por lo que impiden que el agua se acumule sobre la superficie del parabrisas, e impiden que el hielo se forme, garantizando siempre tu seguridad.
  

En caso de presentarse inconvenientes con tu vehículo, recuerda visitar un taller autorizado de la marca, así respaldas su garantía y recibes mano de obra especializada y repuestos genuinos.  

Adicional, recuerda revisar el manual de uso de tu vehículo, allí puedes encontrar recomendaciones útiles para su mantenimiento.

Para finalizar, te recordamos, que para asegurar el correcto funcionamiento de tu vehículo, debe ser revisado al menos 2 veces al año por un técnico capacitado.